MINI

CO0PER
(1961 – 1996)

MINI COOPER

MOTOR

Tipo: 4L Transversal delantero

Cilindrada: 997 cm3

Potencia: 56 cv a 6000 rpm

Par: 7,4 mkg a 3600 rpm

Transmisión: Delantera 4 velocidades

CHASIS

Dirección: Cremallera

Suspensión D/T: Independiente

Frenos D/T: Disco/Tambor

Neumáticos D/T: 145×10

DIMENSIONES

Largo-Ancho-Alto: 3,05-1,41-1,34m

Peso: 635 kg

Peso/Potencia: 11,33 kg/cv

PRESTACIONES

Velocidad máxima: 140 km/h

0-1000 m: 39”9

PRECIO

9.000 €  (06/07/2009)

MINI-KART

“¿Vehiculo que anda a ras del suelo sobre 4 pequeñas gomas, con equipamiento mínimo, motor pequeño, peso pluma, dirección ultradirecta y… sin suspensión?”.

Respuesta:  “Un kart o… ¡un Mini!”.

En los 60 Inglaterra esta de moda: los Beatles, la minifalda, y… el Mini-Morris (o Austin), nacido en 1959, fruto de la astucia del genial ingeniero Alec Issigonis. Un automóvil que revolucionó la vida de las ciudades gracias a una relación tamaño/habitabilidad sin igual, lograda mediante un diseño tan radicalmente nuevo como irrefutablemente lógico: motor transversal, tracción delantera, ruedas diminutas, reducían al mínimo el espacio ocupado

por la mecánica, para cederlo… a los pasajeros: ¡4 adultos en poco mas de 3 m!.

Pero, además, sus cualidades dinámicas llamaron pronto la atención de los aficionados: centro de gravedad bajo, minima distancia entre ejes , peso pluma, el Mini tenia los genes de un deportivo. Solo el motor era algo anémico (850 cc, 35 cv) pero John Cooper, cuyos coches triunfaban en F1 (campeonatos 59/60) se encargo de potenciarlo: 56, 70, 77 cv,…

y algunos mas en las versiones de competición. Las victorias llegaron pronto, sobre todo

en rallyes, donde su minúsculo tamaño les confería una agilidad diabólica. Y cuando los Minis se impusieron en el mítico Montecarlo del 64 y sobre coches mucho mas potentes,

fue la apoteosis, convirtiéndose en héroes populares: David vencía… a Goliat.

Las ventas se dispararon y en su ya larga historia (¡50 años!) ha superado los 5 millones

de ejemplares bajo distintas marcas: Austin, Morris, Rover, Inocenti (en Italia), Authi (en España) y actualmente “Mini” (¡por fin!) bajo la tutela de… BMW. Pero desde su origen y

a diferencia de otros utilitarios contemporáneos (600, 2cv, Escarabajo), el Mini no era (ni

es) un coche “popular” sino mas bien ”chic”, incluso “snob”, el coche que suele verse en

los barrios mas adinerados. Como decía un reportaje de la época (The Motor): “Si usted

ya tiene un Mini, debería pensar en un Rolls Royce como segundo automóvil”.

CARACTERISTICAS 

Presentado en 1961, el Cooper es básicamente un Mini (carrocería autoportante, motor y tracción delanteros, suspensión independiente, dirección de cremallera) con… mas motor. Gracias al aumento de la cilindrada (997 cc) y la adopción de 2 carburadores, la potencia sube hasta los 56 cv , suficientes para el peso de esta miniatura (635 kg). La adopción de frenos de disco (en las ruedas delanteras) es imprescindible, dadas las prestaciones del  nuevo modelo: 140 km/h y menos de 40” para abatir el primer kilómetro. Pero este motor

Ver  Rolls Royce Corniche

es poco flexible, y en 1964 lo reemplaza un 998 cc de carrera corta que, conservando la potencia, aupa el par hasta 7,9 mkg. Ese mismo año, aparece la suspensión Hydrolastic que sustituye a los rudimentarios bloques de caucho. El confort mejora (un poco) pero a cambio el Mini balancea bastante en la aceleración y la frenada.

Desde el principio, muchos piensan que el Cooper merece aun mas potencia y en 1963 aparece el Cooper S, que con 1071 cc rinde ya 70 cv, y un año mas tarde el 1275 S que

con 77 cv alcanza la cifra mágica (para los ingleses,100 mph) de 160 km/h. Naturalmente, esta escalada de potencia va acompañada de mejoras en el chasis (ruedas mas anchas, frenos) la mecánica (radiador de aceite) y de un 2º deposito que duplica la capacidad del

1º (25 l) a costa de perder (¿aun mas?) maletero. Este Cooper S es el ultimo en venderse

en Inglaterra (hasta 1971) aunque las sucursales de Italia (Innocenti) y España (Authi) lo recuperan en 1973 manteniéndolo en fabricación hasta el 75. Son coches menos potentes pero bastante mejor acabados, al igual que el Cooper fabricado por Rover (1990-1996) en

un ultimo intento de resurrección del modelo, antes de la toma de control de la marca por parte de BMW, en 1997. Pero esa… es otra historia.

AL VOLANTE

Para divertirse, con un Cooper del 61 basta (si es posible sin Hydrolastic). Exteriormente

su aspecto es similar al de cualquier Mini, simpático, tradicional y muy ingles: volúmenes redondeados, calandra, manillas y embellecedores cromados y un original detalle: techo blanco (o negro) en contaste con la carrocería. Dentro, el buen gusto (tapicería bitono) va unido a una extrema sobriedad, y al aprovechamiento del espacio: la ausencia de vidrios descendentes (deslizantes delante, basculantes detrás) permite situar portaobjetos en los laterales y el tablero (literalmente) de a bordo cumple la misma función salvo en el centro, donde se sitúa un ovalo que acoge tres únicos relojes Smiths: velocímetro, manómetro de aceite y termómetro de agua. Por lo demás, decir que se esta bien a bordo seria mentir. El respaldo del minúsculo asiento es tan rígido como un policía y su inclinación no responde

a ningún criterio ergonómico. La columna de dirección, plantada entre las piernas, termina

en un volante casi horizontal  y la postura de conducción se parece a la de un tractor. Y los

pies disputan por no pisar 2 pedales a la vez. ¡Ningún problema con el punta-tacón!.

La llave de contacto se sitúa en medio del tablero casi a ras del suelo, pero tranquilos, en

el Cooper nada esta lejos y basta con alargar el brazo. El gruñido del cuatro cilindros llena

el habitáculo, pronto relevado por el graznido de los piñones de la primera, sin sincronizar.

Y desde el principio comprendemos… que no hay suspensión. Que nadie intente decirnos

lo contrario, con planos o palabras: es nuestra espalda la que habla y, a veces, también la cabeza, cuando un bache un poco mas grande que los otros la envía hacia el techo. Pero

Ver  Lotus Europa

lo esencial esta ahí y olvidamos pronto los traqueteos: en ciudad, el Mini se mueve como

un pez en el agua. Visibilidad, nervio, agilidad y tamaño mínimo, nos permiten circular (¡y aparcar!) en un tiempo record y… divirtiéndonos, algo poco corriente hoy en día.

Y en carreteras de montaña (olvidemos la autopista, a su velocidad de crucero ¡ni siquiera nos multarían!) el Cooper es (ya se que es un tópico, pero es la verdad)… ¡un kart!, con la ventaja de poder aventurarse en el mundo real, sobre verdaderas carreteras. Su precisión

es diabólica, gracias a una dirección directa, precisa y exenta de reacciones, que opone la resistencia justa para permitirnos un contacto franco con la carretera. La ausencia total de balanceos (lógico, sin suspensión…), su escasa distancia entre ejes (¡2 m!) y un equilibrio muy aceptable, convierten cada curva en un intenso momento de placer. El Mini se coloca  donde queramos y, en caso de optimismo descarado, permite controlar sus derrapadas (a menudo de las 4 ruedas) mediante un leve movimiento del puño acompañado si acaso por

un (breve) descanso del acelerador. Y el suelo mojado no hace mas que… potenciar esas sensaciones, destacando la inmensa agilidad de esta pequeña bomba. Pronto manejamos como un piloto trazando las trayectorias (con su tamaño hay sitio de sobra) y atacamos el menor cambio de dirección como si nuestra carrera estuviera en juego, incluso cuando de

lo que se trata es de… ir a buscar el pan a la tienda de la esquina.

COMPRAR UNO
El Cooper es un coche que parece pensado para el tuning… y las falsificaciones. Cuidado

pues. El motor es robusto pero la carrocería es sensible a la corrosión y conviene darle un buen repaso antes de la compra. También a la instalación eléctrica, y a la suspensión (?).

Los precios, pese al mito y gracias a su gran difusión, son bajos: 18.000 € por un S y solo 9.000 € por un Cooper (a secas). Una relación precio/placer… inmejorable.

CONCLUSION
Concebido (por Alec Issigonis) como un coche para ciudad, el Mini se transformó (gracias a John Cooper) en el rey de los rallyes. Hoy todos los utilitarios lo superan en prestaciones y en carreteras con curvas hay algunos deportivos que van mas rápido. Pero pocos procuran tanta diversión (sobre 4, 3, o incluso 2 ruedas) a su conductor y, por tan poco precio,… ninguno.

PRODUCCION                                                                    
COOPER (1961-1970) :                   80.620 ej.

COOPER S (1963-1965) :                  4.994 ej.

COOPER S 1275 (1964-1971) :       22.212 ej.

COOPER INNOCENTI (1973-1975) : 30.000 ej.

COOPER AUTHI (1973-1975) :          4.620 ej.

TOTAL :                                         142.446 ej.

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