Montecarlo 1973
© www.clasicosydeportivos.es |
MONTECARLO 1973
El Rally de Montecarlo es un mito y la edición de 1973 aun mas porque estrenaba el recién creado Campeonato Mundial de Rallyes (WRC). Cuarenta años después Jean Claude Andruet (piloto) y Michele Espinosi (alias “Biche” su copiloto) nos hablan de como estuvieron ¡a punto de perderlo! a bordo de un Alpine.
Con una sonrisa encantadora, Michelle asiente callada a la exclamación de Jean Claude: “¿El Montecarlo del 73?. ¡Debíamos haber ganado el del 72!. De hecho, debíamos haber ganado 4 ¿verdad Biche?. Sobre nieve, el Alpine era extraordinario: motricidad, agilidad,.. era un placer pilotarlo.” “Pero apestaba a gasolina“ bromea Biche. Su compenetración es total porque se complementan: Michele es tan serena y discreta como Andruet expansivo y, ese año, salían de una impresionante racha de ¡10 victorias seguidas!.
COROBIN/MIOLANS/BURZET/MOULINON/SAINT BONNET de Munari, Andruet gana en Miolans, pero lo duro empieza en Burzet: ”Hubo una tormenta de nieve – recuerda Biche – y los 150 últimos quedaron bloqueados” Y descalificados, pero ellos no: “Pese a muros de nieve de 2 m – prosigue Andruet– hicimos un buen recorrido en Burzet y Moulinon pero Saboye, mal informado, me dijo que no íbamos en cabeza. Inseguro, me dije que había que espabilar y forcé el ritmo en Saint Bonet, atacando como un loco, y a 2 km de la llegada ¡metí una rueda en la cuneta! Imposible arrancar de nuevo, Biche estaba nerviosa y, por una vez, fui yo el que tuve que calmarla. El tiempo corría, por fin dimos con unos espectadores que nos empujaron, pero el coche tardo algo en arrancar y cruzamos la meta a 2’28” de Munari y 2º en la general. ¡Había que recomenzar!”.
SAINT JEAN/LA MADONE/TURINI/COUILLOLE/TURINI En la especial de Saint Jean, Andruet lo da todo y recupera 23” arrebatándole el 1º puesto a Munari, que se sale pronto y abandona. Ahora su rival es Andersson sobre otro Alpine y Andruet, con ventaja, se relaja: “Antes, solo había terminado Montecarlo una vez, en el 71, y ahora podía terminarlo en cabeza, así que me deje sacar 1’ por mis compañeros porque no quería perder por una tontería”. Su Alpine queda 5º en la Madone, 7º en el col de Turini y 2º en la Couillole, pero sigue en cabeza de la general antes de regresar al Turini. Y entonces, todo bascula: “En la salida note que el coche tiraba a la izquierda y pensé en un neumático. Para asegurarme, aguante hasta el primer viraje, y ahí es donde debí parar: había gente, podían alzar el coche mientras lo cambiábamos. Pero dude y seguí, hacia un desfiladero donde no podía parar y luego km y km sin nadie. Tras pasar el puerto, la goma destrozada arranco la aleta y el coche era inconducible. Nos pasaron seis y cuando llegue abajo estaba desesperado y pensé que era el final, que nunca ganaría Montecarlo”.
COUILLOLE/TURINI/LA MADONE había que animarlo. No recuerdo muy bien lo que le dije:.. que los demás también podían tener mala suerte, que el rallye no había acabado“. Y Andruet sale a ganar en la Couillole: “Biche me recargó. habíamos perdido 7’, quedaban solo tres especiales y Andersson nos sacaba 1’05”. Así que ataqué: volaba ¿eh Biche?”. “Si, tu lo llamabas ir a la búsqueda del tiempo perdido”. Jean Claude gana en la Couillole situándose a solo 20” de Anderson y en la tercera subida del Turini recupera el liderazgo con 14” de ventaja en la general. Pero queda la ultima subida a la Madone: “Andersson salió delante pulverizando mi propio record y todos apostaron por el. Salvo que con Biche ahora estábamos en otra dimensión” Su tiempo batió el record de Andersson ¡por 12”!: “En esas momentos, estas tan motivado que haces cosas increíbles: en la bajada y a 3 km de la meta, llegamos a un encadenado muy rápido, a 150, y luego había un viraje a 75, sobre hielo. Frene al limite, sin dejar ni un milímetro y enfrente había un barranco de 200 m ¡sin raíl! ”. Biche añade con voz tranquila: “Los copilotos no estamos locos, solo… confiamos. Sino, no podríamos ir al lado”. “Desde luego – añade Andruet – ¡tu vida estaba en mis manos!”
CONCLUSION y Alpine triunfo en el primer Campeonato del Mundo, aunque ellos ya no estaban en el equipo. Se habían pasado… a Lancia. “Pero para mi – concluye Jean Claude – una victoria en Montecarlo vale tanto como un titulo de Campeón del Mundo”.
Texto: JR VIDEO > |